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(EFE).- La ONU está empleando el nuevo corredor terrestre abierto entre las ciudades de Alepo y Al Qameshli, en el noroeste y el noreste de Siria, respectivamente, para distribuir ayuda humanitaria a los desplazados en la provincia de Al Raqa.
La responsable de Información Pública de la Oficina de Coordinación Humanitaria (OCHA) en Siria, Linda Tom, dijo a Efe en un correo electrónico que hace dos días 23.710 raciones de comida para el plan de respuesta a Al Raqa fueron enviadas, y el reparto todavía continúa.
«A través del acceso por carretera, la ONU pretende alcanzar de forma regular a gente necesitada, lo que incluye 185.000 personas cada mes en Ain Aisa, Al Tabqa, Yurniyeh, Tel Abiad, Al Karama y Suluk, en la provincia de Al Raqa», detalló la portavoz.
Tom agregó que también se repartirá ayuda en el área de Abu Jashab, en la provincia de Deir al Zur, y en el campo de Mabruka, en Al Hasaka, que acoge a desplazados originarios de Al Raqa.
La responsable de la OCHA reiteró el llamamiento de la ONU a todas las partes del conflicto y a quienes tienen influencia sobre ellas a garantizar un acceso permanente y sin trabas a las organizaciones humanitarias para evaluar las necesidades y proporcionar servicios a los afectados por el conflicto.
En Ginebra, la portavoz del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Betina Luesher, anunció hoy que la ONU había abierto un nuevo corredor terrestre desde Alepo hasta Al Qameshli y había conseguido distribuir 3.000 raciones alimentarias, suficientes para nutrir a 15.000 personas.
«Esta fue la primera entrega de comida por carretera a la zona desde diciembre de 2015 cuando el transporte terrestre de suministros humanitarios se suspendió», explicó Luesher.
Hasta ahora la ayuda para los desplazados de Al Raqa y otras partes del norte sirio se enviaba en aviones hasta Al Qameshli y desde ahí se repartía a otras zonas.
Tom detalló que el corredor pasa por la carretera que va por el norte y que une Alepo con Manbech, en el oeste.
Destacó que la apertura del corredor se ha logrado tras la aprobación del Gobierno sirio.
De acuerdo a los últimos datos de la OCHA, casi 200.000 personas han huido de sus hogares en la provincia de Al Raqa desde noviembre pasado.
Ese mes, las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada liderada por milicias kurdas, lanzaron una ofensiva contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en la región.
El pasado 6 de junio, las FSD, que están apoyadas por la coalición internacional, iniciaron el asalto a la ciudad de Al Raqa, capital provincial.
Tom indicó que «la ONU continúa profundamente preocupada por la seguridad y la protección de decenas de miles de civiles atrapados dentro de la localidad de Al Raqa, ya que los combates y las operaciones militares en el área prosiguen».
