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(EFE).- Brasil obtuvo en mayo pasado un superávit en sus cuentas con el exterior de 2.900 millones de dólares, lo que supone el mejor resultado para ese mes desde el inicio de la serie histórica, iniciada en 1995, informaron hoy fuentes oficiales.
En los últimos doce meses las transacciones en el exterior registraron, sin embargo, un déficit acumulado de 18.100 millones de dólares, equivalente al 0,96 % del producto interior bruto (PIB) del país, según divulgó este martes el Banco Central de Brasil.
En el mismo mes del año pasado el superávit también fue positivo, pero menor, al ubicarse en los 1.200 millones de dólares.
Este es el tercer mes consecutivo en que las cuentas en el indicador obtiene un resultado positivo tras los 1.153 millones de dólares de abril y los 1.400 millones de dólares de marzo.
La entidad indicó que el resultado positivo en la cuenta externa de mayo se debe nuevamente al buen comportamiento de la balanza comercial.
Las exportaciones brasileñas en mayo sumaron 19.792 millones de dólares, mientras que las importaciones se ubicaron en 12.131 millones de dólares, dando como resultado 7.661 millones de dólares en su balanza comercial para ese mes, de acuerdo con los datos del Ministerio de Industria, Comercio Exterior y Servicios.
Según el Banco Central, los ingresos líquidos de inversiones directas en el país sumaron 2.900 millones de dólares en el quinto mes del año, prácticamente la mitad de los 6.100 millones de dólares registrado en mayo de 2016.
Las inversiones directas en el exterior presentaron rendimientos líquidos de 66 millones de dólares para mayo.
El buen dato contrasta con la crisis política que vive Brasil y que ha amenazado la continuidad del presidente Michel Temer, denunciado por la Fiscalía por un supuesto delito de corrupción pasiva con base en los testimonios a la Justicia de varios ejecutivos del grupo JBS.
El escándalo, destapado el pasado 17 de mayo, ha paralizado el trámite en el Congreso de importantes reformas económicas y ha puesto en entredicho la recuperación económica de Brasil, cuyo PIB cayó en los dos últimos ejercicios más del siete por ciento, pero que en el primer trimestre de este año consiguió expandirse el 1 %.
