Sin válvula
En una nueva guía de recomendaciones, la OMS subrayó que el uso de coberturas faciales que poseen válvulas o filtros removibles, utilizadas sobre todo por trabajadores de la construcción, es “ineficiente” o “inservible” para contener la propagación del virus, ya que el usuario podría exhalar aire no lo suficientemente filtrado.
Médicas y no médicas: ¿quién usa cuál?
En esa línea, la OMS sigue recomendando a todo el personal sanitario el uso de mascarillas médicas (las habituales en quirófanos, por ejemplo) en zonas con menor riesgo de contagio aéreo (por aerosoles) y las de mayor protección (N95, FFP2, FFP3) en zonas de mayor riesgo, como las áreas de atención a pacientes con COVID-19.
De tela sí, pero con tres capas
Sobre las mascarillas de tela, la OMS ha dejado claro que las verdaderamente efectivas son aquellas que están elaboradas con tres capas: una interior que permita el paso de la humedad, una intermedia filtrante y una exterior impermeable.
física de al menos un metro con otras personas y asegurar una buena ventilación durante el ejercicio como “medida preventiva más importante”.
“Si la actividad se lleva a cabo en el interior, se debe garantizar una ventilación adecuada en todo momento mediante ventilación natural o un sistema de ventilación que funcione correctamente o se mantenga”.