Un grupo de senadores españoles inició el miércoles su visita a Venezuela reuniéndose con el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, que está bajo arresto domiciliario, y en las próximas horas pretende visitar a otros opositores encarcelados.
«Nuestra misión aquí no es la de generar ningún tipo de conflicto político ni de pelea política», afirmó el senador Dionisio García Carnero, del Partido Popular, al asegurar que el viaje de la delegación de congresistas españoles no busca interferir en los asuntos internos de Venezuela.
«Nos preocupan los derechos humanos, y los derechos humanos no tienen fronteras», indicó el político a la prensa poco antes de ingresar a la residencia del alcalde opositor, ubicada en el este de la capital. Ledezma, quien está siendo procesado por el delito de conspiración, se encuentra bajo arresto
domiciliario desde finales de abril tras ser operado.
García Carnero dijo que espera reunirse con las autoridades electorales para solicitarles que se les permita venir como observadores para las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre. El senador manifestó preocupación por las recientes inhabilitaciones de tres candidatos opositores a los comicios legislativos, y señaló que «nuestro deseo es que estas próximas elecciones puedan celebrarse en absoluta libertad».
En los próximos días los senadores tienen previsto visitar en la cárcel a los dirigentes opositores Leopoldo López y Daniel Ceballos, y reunirse con las autoridades de la Iglesia católica venezolana.
El grupo también sostendrá encuentros con algunos de los candidatos inhabilitados recientemente por la Contraloría General y representantes de las comunidades para conocer la situación que enfrentan por la crisis económica, anunció el secretario ejecutivo de la coalición opositora, Jesús Torrealba.
La misión está integrada por los senadores españoles Iñaqui Anasagasti, del Partido Nacionalista Vasco; Joseph Maldonado, de Convergencia Democrática de Cataluña ; Andrés Gil García, del Partido Socialista Obrero Español, y García Carnero. Se espera que otros congresistas iberoamericanos arriben en las próximas horas al país para incorporarse al grupo.
La delegación de legisladores fue invitada por la oposición venezolana, que en los últimos meses ha promovido acercamientos con políticos de otros países para lograr el apoyo internacional a sus dirigentes encarcelados y el respaldo a las elecciones parlamentarias.
Torrealba dijo que la visita de los políticos extranjeros forma parte de las «manifestaciones de preocupación y de solidaridad de la opinión pública internacional con la lucha del pueblo venezolano por la libertad y la democracia».
El defensor del Pueblo de Venezuela, Tarek William Saab, objetó el viaje de los legisladores, del que dijo forma parte de una campaña de descrédito contra el país, y declaró a la prensa que los visitantes no tienen autoridad para opinar de los asuntos internos.
«Pedimos igualmente respeto a la soberanía y a la democracia venezolana», agregó.
Un grupo de senadores brasileños y el ex presidente español Felipe González intentaron en junio visitar en la cárcel a López y Ceballos, sin conseguirlo. Ese propósito generó el rechazo de las autoridades locales, que los acusaron de intervenir en los asuntos internos y de ejercer acciones para desestabilizar la democracia venezolana.
AP