El reporte «Estatus de Protección Temporal: Las experiencias de Hondureños y Salvadoreños inmigrantes» apunta que el 94 % de los hombres amparados por el TPS trabaja, y de ellos casi el 84 % lo hace más de 40 horas a la semana y el 7 % tiene más de dos empleos.
En el caso de las mujeres, el 82,1 % tiene un empleo y casi el 55 % trabaja más de 40 horas, mientras que el 10 % de las encestadas tiene más de dos trabajos.
«Estamos demostrando con este estudio que los amparados por el TPS son una fuerza trabajadora como ninguna otra, que son los primeros en la línea para ser legalizados. Pensar en expulsarlos del país es absurdo», dijo a Efe Pablo Alvarado, director de la Red Nacional de Jornaleros (NDLON).
Con los resultados del estudio, los defensores del amparo migratorio, del que se benefician cientos de miles de centroamericanos, pretenden demostrar que los inmigrantes protegidos han contribuido al desarrollo del país con su trabajo y el pago de impuestos.
Los salarios de estos trabajadores también serían una muestra del valor de su aporte. El ingreso promedio mensual de los encuestados es de 2.910 dólares por persona, pues los hombres ganan de media 3.598 dólares y las mujeres ganan alrededor de 2.054 al mes.
El 90 % de ellos reporta impuestos cada año, señala el estudio.