La ciudad de Nueva York proveerá de asistencia a abogados de inmigrantes que enfrenten cargos criminales o de familia a través de un centro inaugurado hoy por el alcalde Bill de Blasio.
El Centro de Apoyo Padilla, con una asignación de 1,35 millones de dólares de fondos municipales y estatales, es parte de una red de centros que ofrecen asistencia legal a inmigrantes, siguiendo la directriz de la Corte Suprema tras el caso Padilla vs Kentucky.
El Tribunal Supremo de EE.UU. determinó en 2010, en lo que se conoce como «Padilla vs Kentucky», que los extranjeros tienen derecho constitucional a que sus abogados les informen sobre la amenaza de una posible deportación si se declaran culpables
«Cada neoyorquino merece una representación legal de calidad sin importar su estatus migratorio», dijo el alcalde durante la inauguración del centro, desde donde brindará servicios el Immigrant Defense Project.
Esta organización, fundada en 1997, provee de recursos, entrenamiento y apoyo a abogados criminalistas que representen a inmigrantes.
«Equipar a los abogados para proveer a inmigrantes de la mejor defensa legal posible es una importante pieza para asegurar que nuestro sistema judicial criminal es justo», agregó De Blasio.
El centro proveerá de entrenamiento y asistencia técnica, contará con una línea directa donde abogados expertos en asuntos de inmigración aconsejarán a los más de 2.000 abogados designados para la defensa de inmigrantes en casos criminales y de familia.
También conectará a inmigrantes que necesiten asistencia legal en casos no criminales, como cumplimentar una solicitud para residencia legal o procesos de deportación.
El alcalde recordó que esta ciudad es el hogar de alrededor 1,5 millones de inmigrantes, de los que se estima que unos 700.000 son elegibles para solicitar la ciudadanía.
Declararse culpables o ser convictos aunque sea de un delito menor, o una ofensa no violenta puede tener muchas implicaciones negativas para esta comunidad, destacó además el alcalde.
EFE