Desintegración familiar, pérdida de empleo y de ingresos son los riesgos que enfrentan los salvadoreños de quedarse sin TPS. En El Salvador, muchas familias dependen del envío de remesas.
La posible cancelación del programa de Estatus de Protección Temporal (TPS) afectaría tanto a los salvadoreños que lo poseen como a quienes viven en El Salvador.
El país no cuenta con las condiciones necesarias para lograr que los 195,000 salvadoreños con TPS y sus más de 192,000 hijos nacidos en Estados Unidos logren restablecer sus vidas en El Salvador.
Además, por años, los salvadoreños con TPS han ayudado a la economía del país a través del envío de remesas. Una encuesta realizada por el Centro para Investigación de Migración de la Universidad de Kansas, detectó que el 76.7% de los salvadoreños y hondureños con TPS envían remesas a sus países de origen.
Según la encuesta, en promedio, el envío mensual es de $269.
La Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples indica que 400 mil hogares en El Salvador reciben remesas.