La Organización Panamericana de la Salud (OPS) calificó de «inadecuados» los protocolos de prevención y control del coronavirus (COVID-19) en Nicaragua.
En rueda de prensa por videoconferencia, Carissa Etienne, directora de la OPS, resaltó la «preocupación» del organismo «por la respuesta al COVID-19 que se ve en Nicaragua«.
«Nos preocupa la falta de distanciamiento social, la convocatoria de reuniones masivas. Nos preocupan los exámenes, la trazabilidad de los contactos y la notificación de casos. También nos preocupa lo que vemos como una prevención y control de infecciones inadecuados«, indicó.
Nicaragua es el único país de América Latina que no ha cerrado total o parcialmente sus fronteras. Tampoco ha dictado medidas de confinamiento para la población y mantiene abiertas las escuelas.
También se han promovido ferias, actividades recreativas y de turismo, lo que ha sido duramente cuestionado por médicos, empresarios y opositores.
Mientras en la región aumentan los contagios del nuevo coronavirus, en Nicaragua, un país de 6.3 millones de habitantes, se han detectado solo seis casos importados y un fallecido.
Sin embargo, el gobierno del presidente Daniel Ortega no ha informado cuántas pruebas ha realizado.