Carlos Alberto Espinoza y Josmell Espinoza se declararon culpables de haber cometido un sinfín de estafas a inmigrantes hispanos de 2011 a 2019 en Estados Unidos a través de un call center.
De acuerdo con el Departamento de Justicia, los hermanos de 32 años y 40 respectivamente, contaban con una amplia red que se encargaba de hacer llamadas a hispanos mexicanos y centroamericanos residentes en el país de las barras y las estrellas, desde Perú.
Los Espinoza llamaban a los inmigrantes y les decían que, si no pagaban por supuestas matrículas para recibir clases de inglés, así como productos educativos, se estaban arriesgando a ser detenido por el ICE, ser deportados y otras medidas legales.
Como era de esperarse, muchas víctimas vulnerables del miedo cayeron en la trampa de la banda delictiva ya que en la misma llamada aseguraban a los migrantes ser abogados, funcionarios judiciales o agentes del estado.
El Fiscal Federal Interino, Juan Antonio González, para el Distrito Sur de Florida, reveló que este es un caso más de las estafas de las que son víctimas (a diario) cientos de inmigrantes.
Hasta el momento se sabe que Carlos Alberto Espinoza cometió una estafa de $ 1,3 millones mientras que Josmell Espinoza por más de $ 700,000; los hermanos fueron extraditados desde Perú y se les dictará sentencia el próximo mes de febrero.
FOTO: EFE