El aspirante republicano a la Presidencia de EE.UU. Donald Trump hizo hoy su primer acto de campaña en la ciudad de Nueva York, a solo dos días de la celebración de las primarias en ese estado.
Trump habló ante numerosos simpatizantes en el distrito de Staten Island, un bastión republicano dentro de una ciudad que vota mayoritariamente demócrata.
El acto fue mucho más pequeño que la mayoría de los mítines que el magnate ha llevado a cabo durante su campaña, incluidos varios en otras localidades del estado de Nueva York, como la capital Albany, donde reunió a más de 20.000 personas.
Preguntado por su poca presencia en la Gran Manzana, Trump dijo hoy que, dada la ventaja con la que cuenta en las encuestas, ha preferido concentrarse en puntos del estado de Nueva York donde es menos conocido.
El neoyorquino Trump, que reside en Manhattan, ha sido recibido con fuertes protestas en algunas de sus últimas apariciones públicas en la ciudad, por ejemplo el pasado jueves cuando asistió a una gala del Partido Republicano.
Trump, que lidera la carrera por la nominación republicana, cuenta según las últimas encuestas con una amplia ventaja en Nueva York, que celebra sus primarias el próximo martes.
Staten Island, el más pequeño y apartado de los cinco distritos que forman Nueva York, recibió hoy también a la precandidata demócrata Hillary Clinton.
También en cabeza según las encuestas, Clinton pasó antes por el mayoritariamente latino Alto Manhattan, donde estuvo respaldada por líderes hispanos como el senador estatal y aspirante al Congreso Adriano Espaillat.
Nueva York, 17 abr (EFE).- Los precandidatos demócratas a la Casa Blanca, Bernie Sanders y Hillary Clinton, intensificaron hoy su campaña en Nueva York, con el senador por Vermont dándose un baño de masas en Brooklyn y la ex secretaria de Estado buscando el voto latino en el Alto Manhattan.
A dos días de las primarias en el estado, Sanders reunió a miles de simpatizantes en un mitin en Prospect Park, donde ya horas antes del inicio del acto se acumulaban largas colas para acceder.
De vuelta a Brooklyn, donde nació y creció, el precandidato demócrata a la Presidencia de Estados Unidos estuvo arropado por actores como Danny DeVito y Justin Long y el grupo Grizzly Bear.
«Cuando era un niño que crecía en Flatbush (el barrio del que es originario), nuestros padres nos traían a Prospect Park, pero nunca hablé aquí a 20.000 personas», bromeó Sanders al inicio del mitin.
En su discurso, como es habitual, insistió en la necesidad de una «revolución política» que desemboque en un Gobierno que trabaje para todos y no para los más poderosos.
«Juntos vamos a crear una economía que funcione para la gente trabajadora, para los enfermos, para los ancianos… para todos nosotros, no sólo para el 1 por ciento (más rico)», prometió.
Sanders, además de profundas reformas económicas y en materia de sanidad y educación, defendió cambios en el sistema de justicia para acabar con el encarcelamiento masivo, abogó por poner fin a la llamada guerra contra las drogas y denunció los obstáculos que sufren distintas minorías.
Por detrás de Clinton en las últimas encuestas pese a su gran tirón entre los jóvenes, Sanders insistió en la importancia de las primarias del próximo martes en Nueva York.
«Hagamos que el estado de Nueva York lleve a este país a la revolución política», clamó.
A lo largo del día, el senador visitó también un complejo de viviendas públicas en uno de los barrios más desfavorecidos de Brooklyn y habló a un público mayoritariamente negro en una iglesia de Harlem.
Mientras tanto, su rival en la carrera demócrata hizo campaña en el vecindario hispano de Washington Heights, en el Alto Manhattan, donde incluso se vio a la que fuera primera dama bailando al ritmo de música latina.
Pese a su ventaja sobre Sanders de cara a las primarias de Nueva York, las últimas encuestas apuntan a que el veterano político, que se define como socialista democrático, cuenta con más apoyo entre los latinos de este estado.
Clinton estuvo arropada en el Alto Manhattan por varios líderes hispanos como el senador estatal y aspirante al Congreso Adriano Espaillat.
«Imaginen una América en la que estemos unidos de nuevo. Donde nos enfrentemos a la retórica del odio que llega de los republicanos, donde digamos a Donald Trump: ‘basta'», dijo utilizando el español para esa última palabra.
EFE