La madre de dos de las pequeñas que fueron halladas en EE.UU habló desde México y explicó por qué dejó ir a sus hijas en compañía de otros adultos.
“Necesito que me ayuden porque quiero estar con mis hijas, yo nunca hubiera querido dejarlas ahí. Me dolió en el alma y Dios lo sabe”, dijo Sandra Padilla, madre de Nasley y Cristal, de 7 y 4 años de edad.
Las niñas se encuentran en custodia de las autoridades estadounidenses, que las pusieron a salvo tras encontrarlas en condiciones críticas y peligrosas para su salud.
“Nunca quise dejarlas ahí, Dios sabe que siempre le pedí a él que me las cuidara”, dijo.
“Con el dolor de mi alma las dejé ahí”.
De acuerdo a la versión de la centroamericana, las niñas viajaban con su esposo, su cuñado y la madre de otras de las niñas de nombre Daisy. De ellos nada se sabe.
Sandra Padilla ahora pide al gobierno estadounidense ayuda para reunirse con sus hijas.