De acuerdo con un estudio, los latinos se infectan de COVID-19 con una diferencia de cuatro a uno comparados con los residentes blancos, y las autoridades de Salud sospechan que el alto índice entre los hispanos se vincula con su cultura e idiosincrasia.
La primera razón es que hay muchos trabajadores latinos esenciales o en la primera línea contra la pandemia, lo que los expone a mayor riesgo de contraer el COVID-19 en diversos tipos de empleos.
Al mismo tiempo la comunidad latina padece más de las llamadas “condiciones médicas subyacentes”, como la diabetes e hipertensión arterial que potencializan el riesgo de enfermar y agravar por el COVID-19.
Además, los latinos son más dados a demostrar afecto, una tendencia que es contraproducente en términos de la pandemia.