El fin de semana pasado, dos agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) sorprendieron a los empleados y comensales del restaurante “Casa Mexicana” en Bloomer, Wisconsin, donde detuvieron a tres de los empleados.
El dueño del lugar, Joaquín Ángel López, un ciudadano naturalizado, dijo que los agentes hicieron varias preguntas y terminaron por llevarse a los trabajadores, lo que obligó a cerrar el local.
“Se dirigieron de inmediato hacia los empleados”, dijo López. “Tuvimos que cerrar ese día”.
Agregó que desconoce si sabrá sobre el destino de sus empleados, ya que desconoce si lo contactarán, algo que no ha ocurrido desde que fueron detenidos.
Los residentes en Bloomer dijeron estar sorprendido por los hechos, dado que no habían visto redadas de ICE en su localidad.
“Si no estaban haciendo nada malo, es un poco triste”, dijo Cheryl Frazier. “Espero que todo salga bien”.
El jefe de Policía local, Jared Zwiefelhofer, confirmó la redada donde fueron capturados dos hombres y una mujer.
ICE mantiene operativos en forma permanente, pero en los espacios de trabajo regularmente envía agentes tras investigaciones a las empresas, a menos que tenga indagatorias sobre objetivos específicos.