Las donaciones destinadas a la ayuda a las víctimas de la matanza de Orlando (EE.UU.), que dejó 50 muertos -incluido el atacante- y 53 heridos, han alcanzado ya los siete millones de dólares, anunció hoy en rueda de prensa el alcalde de la ciudad, Buddy Dyer.
El dinero recaudado por la fundación OneOrlando servirá para ayudar a las familias afectadas y las víctimas del tiroteo que se produjo en la madrugada del domingo pasado en la discoteca de ambiente gay Pulse, donde el asaltante, Omar Seddique Mateen, abrió fuego contra la multitud.
«El propósito de los fondos servirá para paliar, ahora y después, las necesidades económicas de nuestra comunidad, tras los efectos de la tragedia del club Pulse», señaló Dyer.
La distribución de las donaciones será administrada por la Fundación Central de Florida, organización que trabaja con más de 400 fondos de caridad.
El dinero se destinará a organizaciones sin ánimo de lucro que prestan apoyo a las víctimas y familiares de estas, el colectivo hispano de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales (LGBT) y otros afectados por el tiroteo.
Entre las compañías que han efectuado donativos figuran Walt Disney, la operadora de televisión Comcast NBCUniversal, ambas compañías con un millón de dólares y el equipo de baloncesto local Orlando Magic, con 100.000 dólares, entre otros.
En una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por numerosas organizaciones muy activas desde que se produjo la matanza el pasado domingo, el alcalde pidió a aquellos que conozcan a alguien afectado por la peor matanza por armas de fuego en EE.UU. a que les animen a buscar ayuda.
Para lo cual, las autoridades crearon el centro de asistencia familiar, que desde que abrió hace dos días ha apoyado a 94 familias y 256 personas.
Este centro ofrece servicios que van desde ayuda para superar el dolor, asesoría financiera y colaboración para tramitar visados para poder entrar al país para recibir los restos de los familiares fallecidos o visitar a los heridos, entre otros.
Además, explicó el alcalde, se han entregado más de 200 boletos de avión gratis a las familias de las víctimas para que se desplacen a la ciudad de Florida.
Miami (EE.UU.), 17 jun (EFE).- Omar Seddique Mateen, autor de la masacre en una discoteca gay de Orlando que dejó 50 muertos -incluido el atacante- y 53 heridos, intercambió mensajes de texto con su mujer, Noor Zahi Salman, durante el tiempo que duró el asalto, informaron hoy medios locales.
En uno de los mensajes de texto que Mateen, de 29 años, envió durante el tiroteo a Zahi Salman le preguntó a su esposa: «¿Ves lo que está pasando?», señaló una fuente de la familia al canal NBC News.
Al parecer, según recogió este medio, la madre de Salman llamó a su hija alrededor de las 2.00 hora local (6.00 GMT) del domingo, la despertó y preguntó si sabía dónde estaba Mateen.
Salman respondió a su madre que desconocía el paradero de su marido y, a continuación, le envió un mensaje de texto y le preguntó dónde estaba, a lo que Mateen respondió: «¿Viste lo que está pasando?»
La mujer contestó que no, y Mateen respondió: «Te quiero, cariño».
Sobre las 2 de la madrugada del domingo, Mateen comenzó a disparar en la discoteca de ambiente gay Pulse donde se celebraba la Noche Latina y, tras intercambiar un tiroteo con la Policía, se atrincheró en el local durante tres horas, hasta que los agentes entraron a rescatar a los rehenes y le abatieron.
Pero aparentemente esa no fue la única actividad del autor de la masacre con el teléfono, con el que se comunicó con el canal de televisión News 13, donde habló con un productor al que le preguntó si sabía algo sobre el tiroteo, al responder que sí, Mateen dijo: «Yo soy el que dispara».
«Lo hice por el Estado Islámico», dijo el autor de la llamada, según el productor Matthew Gentili, que fue interrogado por las autoridades, que no han confirmado si realmente se trató de Mateen, estadounidense de origen afgano.
Durante las conversaciones con los negociadores de la Policía de Orlando, el propio Mateen declaró su lealtad a este grupo terrorista.
El autor de la matanza también utilizó su teléfono durante la matanza para entrar en la red social Facebook, donde publicó mensajes en los que culpaba a Estados Unidos de la muerte de «mujeres y niños inocentes», según un documento hecho público por el Comité Seguridad Nacional del Senado.
En sus mensajes, Mateen también exigió a EE.UU. que dejasen de bombardear el territorio controlado por el Estado Islámico.
También utilizó Facebook para saber de la repercusión de la matanza al buscar las palabras «Pulse Orlando» y «tiroteo».
Miami (EE.UU.), 17 jun (EFE).- Dos de los 53 heridos en la matanza de Orlando (EE.UU.), en la que fallecieron 49 personas, fueron dados de alta, mientras otros 6 siguen en estado crítico, informó hoy el grupo Orlando Health.
Esta organización, que administra el Centro Médico Regional de Orlando, al que fueron llevados 44 de los 53 heridos, indicó hoy que 23 heridos siguen hospitalizados.
La red de hospitales indicó que, del total de los 44 pacientes que ingresaron tras el tiroteo ocurrido en la madrugada del domingo en la discoteca de ambiente gay Pulse, 12 ya fueron dados de alta.
Desde que comenzaron a llegarles los heridos, el Centro Médico Regional de Orlando, situado a escasas cuadras del local nocturno, ha realizado 52 operaciones quirúrgicas, indicó Orlando Health.
A estas intervenciones hay que sumar las dos que están programadas para hoy, indicó la organización médica.
Cincuenta personas, incluido el presunto autor de la matanza, Omar Seddique Mateeen, un estadounidense de 29 años, quien estaba armado con un fusil de asalto y una pistola, murieron en la discoteca.
De los 44 pacientes que ingresaron en el Centro Médico Regional de Orlando por este tiroteo, la peor matanza por arma de fuego en la historia de EE.UU, 9 murieron poco después de llegar al hospital debido a la gravedad de sus heridas.
De los 23 pacientes todavía ingresados, explicó el Orlando Health, cuatro se encuentran en «estado reservado», uno menos que hace dos días, y 14 en estado estable, también uno menos que el pasado día 15, más los 6 en estado crítico, cifra que se ha mantenido inalterada.
Los cirujanos de este centro médico explicaron en rueda de prensa este martes que lo vivido aquella noche en el hospital se parecía a una «escena de guerra», debido a las «grandes heridas» que presentaban los pacientes, producidas por impactos de bala de un arma de «gran calibre».
EFE