La candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, consideró hoy una «incitación a la violencia» el comentario de su rival republicano, Donald Trump, sobre que los defensores de las armas de fuego pueden «hacer algo» para evitar que la exsecretaria de Estado llegue a la Casa Blanca.
«Las palabras importan. Las palabras pueden tener tremendas consecuencias. Ayer vimos el último de una larga serie de comentarios de Trump que se pasan de la raya», dijo hoy Clinton en un acto de campaña en Des Moines (Iowa).
«Cada uno de estos comentarios demuestran que Trump no tiene el temperamento para ser presidente de Estados Unidos», agregó.
Clinton insistió en que «estas no son unas elecciones normales» y dijo estar «conmovida» por que personalidades y votantes republicanos estén sumándose a su campaña al considerar que Trump «no representa sus valores».
El magnate neoyorquino vuelve a estar en el centro de la polémica y las críticas por haber dicho ayer que los defensores de las armas de fuego pueden «hacer algo» para evitar que Clinton gane las elecciones de noviembre, lo que ha sido interpretado por amplios sectores como un llamado a la violencia.
En un acto celebrado el martes en Carolina del Norte, Trump insistió en uno de sus habituales ataques a Clinton, al asegurar que «quiere esencialmente abolir la Segunda Enmienda», el artículo de la Constitución de EE.UU. que recoge el derecho a portar armas.
«Por cierto, si consigue elegir jueces (del Tribunal Supremo) no va a haber nada que podamos hacer, aunque para la gente de (que defiende) la Segunda Enmienda quizá sí que hay algo (que pueden hacer). No lo sé», agregó.
Estos comentarios desataron inmediatamente las críticas a Trump tanto en Twitter como en medios de comunicación, sobre todo desde sectores demócratas, al considerar que el magnate hizo una incitación a la violencia.
Durante la intervención de Clinton, un individuo fue interceptado hoy por los agentes de seguridad que custodiaban el acto cuando se aproximaba corriendo a la tarima en la que estaba la candidata, sin que se haya informado de sus intenciones, aunque algunos medios mencionaron que era un defensor de los derechos de los animales.
Washington, 10 ago (EFE).- La candidata demócrata a la Presidencia de EE.UU., Hillary Clinton, trató hoy de cortejar a los votantes de Utah, uno de los estados más conservadores del país y el epicentro de la fe mormona, al asegurar que su rival, Donald Trump, carece de la moralidad necesaria para ser presidente.
Los votantes de Utah, donde ningún candidato demócrata ha ganado unas elecciones presidenciales desde 1964, parecen poco entusiasmados con el actual aspirante republicano, y Clinton intentó hoy beneficiarse de esa frustración con un artículo de opinión publicado en el diario mormón «Deseret News».
«Llevo años luchando para defender la libertad religiosa. Como secretaria de Estado, la convertí en un pilar de nuestra política exterior», aseguró Clinton en su artículo.
Para la candidata demócrata, la libertad de culto «es uno de los ideales sagrados que define» a EE.UU. como país, «y eso es algo que Donald Trump no parece comprender».
«Cada día, Trump sigue demostrando que carece de la moralidad necesaria para ser nuestro comandante en jefe», afirmó Clinton.
El poco ortodoxo candidato republicano reúne el 37 % de los apoyos en Utah, un porcentaje muy bajo para un estado prácticamente garantizado para los conservadores desde hace más de medio siglo, mientras que el 25 % respalda a Clinton, según una encuesta publicada este lunes por la web especializada Utahpolicy.com.
Decidida a aumentar su respaldo, Clinton aceptó la oferta de «Deseret News», que invita a todos los candidatos a escribir en su diario pero hasta ahora no recibe respuesta de Trump.
La ex secretaria de Estado condenó la propuesta del magnate de impedir la entrada a todos los musulmanes, que amenaza la «tradición y los valores» de EE.UU.
Clinton recordó que dos políticos prominentes en Utah, el excandidato presidencial republicano Mitt Romney y el actual gobernador del estado, Gary Herbert, criticaron esa propuesta.
También citó a un exsenador republicano por Utah, el mormón Larry Pressler, que la apoya a ella en la carrera presidencial y que compara la propuesta de Trump sobre los musulmanes con la orden de exterminar a los mormones que dio en 1838 el gobernador de Misuri, Lilburn Boggs.
«Este noviembre, lo que está en juego no es nada menos que el tipo de nación que queremos ser», dijo Clinton.
En ese sentido, subrayó la necesidad de «aprobar una reforma migratoria integral para sacar a las familias de las sombras y mantener unidos a los padres y sus hijos, asegurar que a las mujeres se les pague igual que a los hombres» y «garantizar una baja familiar pagada», entre otras políticas.
«Depende de nosotros decidir si nos esconderemos detrás de la noción de Trump de que solo hay una forma de ser estadounidenses, o si reconoceremos la sabiduría fundamental de nuestra Constitución, que enseña que nos necesitamos los unos a los otros para que florezca este país», defendió la exsenadora.
Clinton citó también a la hermana Rosemary M. Wixom, la primera mujer en unirse al Consejo Ejecutivo del Templo y la Historia Familiar de la iglesia mormona, quien aseguró una vez que «los individuos son fuertes, pero juntos, con Dios, son invencibles».
«Si me dan el honor de ser su presidenta, lucharé cada día para cumplir la responsabilidad sagrada» de «defender» la Constitución estadounidense y la libertad religiosa consagrada en ella, prometió la candidata demócrata.
Washington, 10 ago (EFE).- La campaña de la candidata demócrata a la Presidencia de EE.UU., Hillary Clinton, lanzó hoy una plataforma para aglutinar al «creciente» número de republicanos e independientes que apoya a la ex secretaria de Estado frente a su rival por la Casa Blanca, el magnate Donald Trump.
La plataforma, denominada «Juntos por Estados Unidos», trabajará para «crear coaliciones de republicanos e independientes que apoyan a Hillary Clinton, con el objetivo de «amplificar sus voces para que lleguen a otros republicanos e independientes», detalló la campaña de la candidata en un comunicado.
Cerca de 50 personas componen actualmente esa lista de figuras republicanas e independientes que apoyan a Clinton, entre las que hay exmiembros del Gobierno, congresistas y excongresistas, exembajadores, unos 20 funcionarios conservadores «de alto nivel» y líderes de negocios.
Unos de los últimos en unirse a esa lista han sido el ex secretario de Comercio Carlos Gutiérrez, la ex secretaria de Vivienda y Desarrollo Urbano Carla Hills, los excongresistas Connie Morella y Chris Shays y el ex director de Inteligencia Nacional John Negroponte, de acuerdo con la campaña de Clinton.
También integran el grupo, entre otros, el ex alcalde de Nueva York Michael Bloomberg y la presidenta ejecutiva de Hewlett Packard (HP), Meg Whitman, una destacada donante republicana.
«Los estadounidenses esperan que el próximo presidente nos ayude a unirnos para abordar los grandes desafíos que enfrenta el país y el apoyo bipartidista a Hillary Clinton es la última prueba de que ella puede trabajar con todas las partes para hacernos más fuertes juntos», destacó el jefe de campaña de la ex secretaria de Estado, John Podesta.
Sin importar su afiliación política, «los votantes están cada vez más preocupados de que la tendencia de Trump a intimidar, menospreciar y degradar a otros envía el mensaje equivocado a nuestros hijos», advirtió Podesta.
Durante la Convención Demócrata celebrada en Filadelfia en julio, varias figuras de tendencia republicana e independiente ofrecieron discursos de apoyo a Clinton y de advertencia contra una posible victoria de Trump en las elecciones presidenciales del próximo 8 de noviembre.
EFE