(EFE).- Un total de 164 personas murieron y más de 1.500 resultaron heridas en el terremoto que asoló anoche la provincia iraní de Kermanshah, fronteriza con Irak, según los últimos datos publicados hoy por el Ministerio de Sanidad.
El viceministro de Sanidad, Qasem Yan Babaie, dijo a la agencia oficial de noticias IRNA que es muy probable que siga aumentando la cifra de víctimas.
Las labores de rescate continúan para buscar entre la amplia destrucción a supervivientes del seísmo, que alcanzó 7,3 grados en la escala de Richter.