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La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) expresó hoy preocupación ante las condiciones en las que vivirán los menores inmigrantes centroamericanos que serán albergados en la base militar aérea de Holloman en Nuevo México.
«Nos han dicho que podrían ser entre 400 a 800 menores entre los 13 y 17 años que serán enviados a esta base militar», dijo hoy a Efe Vicky Gaubeca, directora del Centro Regional de Derechos de la Frontera de ACLU en Nuevo México.
«La preocupación mayor es que por estar dentro de una base militar el acceso a estos niños será mucho más difícil, nos preocupa que no reciban representación legal y de salud», dijo Gaubeca a Efe en entrevista vía telefónica.
El Gobierno federal planea albergar temporalmente a los niños inmigrantes centroamericanos en la base militar a medida que el espacio en albergues para inmigrantes en otros estados se acabe.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) podría comenzar a enviar a los menores a la base de Holloman posiblemente a finales de este mes.
La Patrulla Fronteriza arrestó a más de 17.300 niños no acompañados en la frontera sur entre octubre y diciembre de 2015, que en su gran mayoría proceden de El Salvador, Guatemala y Honduras.
«Estaremos muy pendientes de que las condiciones en las que estén estos niños sean humanitarias, que tengan una buena representación legal y no sean obligados a regresar a los países donde corre peligro sus vidas», manifestó la activista.
Los menores no acompañados que son detenidos en la frontera deben permanecer en custodio del HHS mientras su caso es revisado por las cortes de inmigración, proceso que puede tomar un promedio de 32 días, antes de ser entregados a sus padres o algún familiar cercano en este país.
EFE
